Salida
de Jartum y vuelta en Jartum. El accidente
con Adrienne y lo que se derivó.
Enésimo
salida sobre una carretera en gruyere:
Hay nosotros fueron. Es 15h00, pensamos
llegar a Kosti en la tarde para pasar la
noche. Ante nosotros del asfalto, la carretera
es buena paso de problemas en vista, vamos
a comer del Km alrededor nosotros las casas
nos hacemos cuanto más en de más
más raros y comenzamos a dar paso
a las tierras irrigadas que transforman
este desierto en oasis. Pero, ya el verdor
nos deja y entramos en la monotonía
del llano. Lejos, a nuestra derecha, una
ligera difracción de la luz nos deja
conjeturar el Nilo. Hace calor, pero la
climatización (ventanas abiertas)
tanto muy conocida del acad hecho maravilla.
Pusimos nuestras bolas Quies para evitar
terminar sordo, incluso con 602cm3 se puede
hacer uno consagrado guirigayes. Repentinamente,
algunos agujeros aparecen sobre la carretera,
Geoffroy está a los pedidos, evita
uno, luego dos, pero no puede evitar un
tercero. El coche reacciona bien, a pesar
de los 35 Litros de gasolina y los 30 Litros
de agua que él añadimos. Es
necesario decir que en Jartum hicimos del
hogar, vendimos o dimos algunos objetos
o utensilios inútiles. Cuando es
a mi vuelta conducir, hacemos la vuelta
del coche para comprobar los neumáticos
por seguridad. Bastante extrañamente,
se desinfla el neumático posterior
derecho y visto su desgaste eso hace algunos
Km que nosotros peldaños como eso.
Con todo, no estallamos, ya que permanece
0,8Kg de aire en el neumático. Vista
de cerca la explicación es simple,
la llanta se deformó como mantequilla
sobre el famoso agujero que habíamos
visitado.
Con ayuda de un martillo, afortunadamente
llevado para eso, rectificamos el bazar
mal que bien. Vuelto a inflar el neumático,
la llanta casi no huye ya, podemos volver
a salir.
Algunos Km y muchos agujeros más
lejos, nosotros aquí de nuevo en
tren de rectificar una luego la otra rueda.
Resumidamente, sobre los 80Km/h que pensábamos
hacer en media, somos reducidos a rodar
lentamente y a añadir todos estos
paros a nuestra media.
Primera
daña cuatro estrellas:
Como a nuestra (mala) práctica nosotros
peldaños de noche y llegamos sobre
los golpes de 10h00 a Kosti. Perdidos en
la ciudad, no encontramos obviamente la
parroquia en la cual pensábamos pasar
la noche. Por contra, para pedir nuestro
camino desafiamos guardias en facción
delante de los edificios de una ONG: ADRA.
Después de algunos minutos de palabrerías,
nos proponen espontáneamente albergarnos
y llaman al director, que no responde, luego
el director-suplente que no responde más.
Por último, llaman al director financiero
que llega 20 minutos más tarde y
nos ofrece la morada en del guest-house
compuesta de una gran habitación
climatizada con ducha y mosquiteros. Interesado
por nuestro viaje, nos propone incluso para
el día siguiente una visita de su
proyecto de aducción de agua. Resumidamente,
el gran lujo.
Muerte de hambre, preparamos un enyesado
rápidamente hacemos de spaghettis,
que devoramos tomando bien cuidado de no
hacernos preceder en esta tarea por una
invasión de langostas. Se se creería
a la caída de las hojas en otoño,
bajo un árbol perdiendo su ornamento
compuesto de millares de estos bichitos
alados que caen de Dios saber- donde en
nuestra base.
La
cortesía hacia los policías:
Grandes saluts de la mano, grandes sonrisas,
retrasar y rodar a 20 Km/h luego acelerar
suavemente observando ante sí. He
aquí el super método que adoptamos
durante todo el trayecto para nos evitar
nos detener a las comisarías. Es
necesario decir que somos crueles, viajar
en pleno ramadan es puede ser fácil
para nosotros, pero para estos pobres policiales
encargados de estos puestos de control,
es muy fatigante dejar su sillón
el vientre vacío. Entonces, se agitan
y hacen señales removiendo la mano
de cumbre en parte baja para decirnos detener.
Hay siempre courtoisement por una gran sonrisa
y de los saluts amistosos. Apenas tomamos
riesgo ya que el viejo ciclomotor o el asno
que les sirve de vehículo no hace
el peso cara a nuestro bólido. Una
vez, el agente está sobre la carretera,
nos es pues difícil evitarlo. Afortunadamente,
no es grave ya que es encantador (al igual
que los agentes sudaneses de a otra parte),
le presentamos nuestros papeles que observa
en todos los sentido, más por curiosidad
delante de un pasaporte francés que
por sospecha. Dicho pasaporte pasa a continuación
en las manos de todos sus colegas igualmente
curiosos. Quieren apretarnos todos la pinza,
saber esto que hace este extraño
coche en su país, rig, lo sacud y
darnos la bienvenida en Sudán. En
esto, nos invitan que permanezca con ellos,
pero so'lo es 17h00 y queremos aún
rodar un poco antes de instalarnos para
dormir. Llegado al final de la carretera
en alquitrán (todas las buenas cosas
tienen un final), pedimos la hospitalidad
a la comisaría que se encuentra allí.
En la espera de la ruptura del ayuno, la
recepción es menos calurosa que al
puesto anterior, pero estamos en seguridad
para la noche.
La
arena y recomendaciones :
La interrupción del asfalto es brutal,
ante nosotros se extiende una inmensa pista
cavada de rodera a la medida de los grandes
camiones 38 Toneladas, 8 ruedas motrices,
que la recorren sin paros.
"con un coche como aquélla,
pasarán nunca, es demasiado baja,
no bastante potente, él es necesario
una 4 ruedas motrices, mínimas".
Todas estas reflexiones, y la visión
de pesadilla de esta pista de arena suave,
me rompen un poco el moral. ¡Pero
Geoffroy es que confía, Adrienne
es una super caja, se va a pasar se es seguro!
A partir de la primera hora de carretera,
ensablons, además, mal cambiados
a menudo por un retén, nos encontramos
sobre una pista reservada para los camiones
con terribles roderas sobre las cuales tenemos
el aire de una pulga. Con todo, las dos
ruedas de derecha sobre el talud central
y las de izquierda en la rodera, vamos a
un tren de infierno (25km/h). Si retrasamos
es el enarenamiento inmediato. Repentinamente,
la pista se estrecha, el suelo se vuelve
duro como ladrillo y el talud se acentúa,
lo transporta podría darse la vuelta
continuamente. Sobre la izquierda, roza
luego tecla el borde de la rodera y las
raíces de los árboles puestas
a desnudo por los camiones. Se arranca casi
el ala antes de quien era intacta y faltamos
perder nuestro faro. Pero avanzamos, es
nuestro solo hola.
Ensablés
desde hace 5 minutos y el motor que recalienta
y come del polvo no empieza ya. Cima de
mal oportunidad, llega en frente nosotros,
un monstruo amarillo estado cargado a bloque.
Juchées sobre sus mercancías,
una quincena de personas nos observan incrédules.
Las 38 Toneladas al paro, descienden para
sacarnos todos de la pista en dos tiempos
tres movimientos. Por señales, nos
explican que no estamos sobre la buena pista,
ya que ésta es la de los camiones,
los de los coches se encontrado más
lejos.
Líder
de la reunión el Jartum- Chad:
Buena media: 25 Km en las 4, solo consuelo,
el paisaje, entramos en la sabana enarbolada,
derramada eso y allí por algunos
baobabes.
La
ciudad de en Nahoud se encuentra en alguna
parte allá por algunos Km apenas.
Pero una vez más ensablé y
la noche comienza a caer. El tiempo de vaciar
el coche, de retirar la arena con la pala
y con las manos, las famosas alfombras que
nos permiten hacer 2 o incluso 3 metros,
luego de reiniciar hasta a veces subió
sobre el talud herboso y hace daña.
Para avanzar, tenemos de dejar la pista
que nos hemos convertido en impracticable.
Del golpe, navegamos sobre el borde en las
altas hierbas. Hace noche, los faros, que
encienden el cielo, tiene mal que bien a
con tensores, y después nosotros
ser distantes de la pista para pasado un
campo, zigzagueamos alegremente a través
de los árboles, no sabiendo demasiado
qué estrella seguir. Tras una media
hora, se nos pierde definitivamente y decidimos
acampar allí. En algunos minutos,
preparamos nuestra primera noche en el arbusto
a la bonita estrella. No sabemos esto que
los espera, cuáles son los animales
ni la gente quien podríamos entrevistar
con. Sólo, de vez en cuando, un asno
respondiendo a un perro nos reconforta mostrándonos
que una forma de vida domesticada es posible
en medio de estas altas hierbas y estos
arbustos de espinoso. Con el fin de restaurarnos,
desembalamos rápidamente nuestra
mesa, nuestras sillas, nuestros catres de
tijera y preparamos nuestra comida. Iluminados
por las velas, en tren de comer un m. cuyo
ingreso callaré, rejouons una escena
de Out Of Africa, pero sin las platerías
ni los criados.
El
camino de los asnos:
Las primeras horas del día del día
siguiente son terribles, 15 km nos separan
de en Nahoud. 15 Km de arena. No hay un
momento de respiro, se ensa, salir, traspalar,
empujar, saltar en el coche que circula
ya y reiniciar algunos metros más
lejos. Después de en Nahoud la carretera
es muy también que se desespera.
Pero encontramos el camino de los asnos.
Constituido por una o de dos rastros vaciados
en medio de las altas hierbas, presentan
la innegable ventaja de no ser arados por
potentes 4x4. Avanzamos pues mucho más
rápidamente. Pero a veces, un campo,
cuyo cierre está constituido por
ramas de espinoso (se dirían más
bien gradas tanto las espinas se es grande),
nos barre la carretera. Debemos entonces
retirar nos este cierre barrer el suelo
con el pie y penetrar al bonito medio de
un campo de mijo (grande como maíz)
o hibiscus (pequeñas plantas a flor
roja que sirve para hacer el té caliente
o frío y totalmente delicioso).
A la salida de un pueblo no podemos ya,
delante de un mar de arena que literalmente
los tragó, nosotros decidimos dejar
al borde camino todo esto que los sobrecarga.
Tee-shirts, bolígrafos, pantalones,
calzados, tabla y otras astucias que so'lo
sirven en Out Of Africa, pero no en el arbusto
con del acadyane. El resultado es inmediato,
avanzamos mejor. La carretera también
se vuelve mejor. Comienzo un poco a reanudar
confianza y ya a no funcionar como un autómata
que empuja o vacia arena. Estoy contento
que Geoffroy lo haya llevado durante todo
este tiempo. La única perspectiva
de encontrarme bloqueado, sin nada para
reparar mi neumático estallado o
un problema mecánico, me minaba el
moral. Debemos ser para a fines del mes
en el Camerún y tenemos aún
3000 Km de pista antes de ser, es necesario
hay y hasta hoy dejaba mi cerebro velo para
creer.
¡Algunas
pipas adornan siempre una salida en el arbusto!
:
Desde hace algún tiempo el coche
empieza con dificultad, tenemos incluso
de impulsarla una vez para hacerla empezar.
Por oportunidad, la arena no era demasiado
suave a este lugar y quiso bien volver a
salir después de algunos dolorosos
metros.
¡Muy, más nada! Vuelvo a la
clave pero no se produce nada. ¡Galère!
¡Y si intentemos de nuevo la manivela!
La primera vez que lo habíamos intentado,
el parachoques, que habíamos puesto
al frente, nos impedía que lo utilizara.
Este golpe, tenemos más oportunidad.
Como por milagro vuelve a entrar hasta al
final y después de algunas vueltas,
el coche empieza. Salvado, tanto como tendremos
de la fuerza en los brazos, el coche podrá
empezar.
Un
poco más lejos, estamos en las altas
hierbas, no vemos nada sino avanzamos sobre
una superficie más o menos firme,
no compadecemos. Todas las gramíneas
de la sabana producen en esta temporada
millares de semillas cuanto más o
menos mayores que se infiltran por todas
partes en el motor. El filtro a aire es
lleno y debemos vaciarlo regularmente. Peor,
de tiempo a otro, un pequeño olor
de quemado nos recuerda amablemente que
el arranque no es el último problema
seguramente y que es necesario tener cuidado
con las estas hierbas que obstruyen el motor
que, recalentado, podría desencadenar
un fuego de arbusto. Por otra parte, en
un campo de mijo, un tronco rebelde terminó
por nosotros arrancar nuestro filtro a gasolina.
Lo observaremos el poco más lejos
a causa de un olor de gasolina más
fuerte que de práctica. Afortunadamente
en ese momento preciso, no había
pequeño olor de hierba quemado si
no eso había sido la catástrofe.
So'lo perdimos algunos litros de gasolina,
pero debemos en adelante tener cuidado con
el todo.
El
rastroja puede ocultar otro:
Es 15h00, Geoffroy acaba de pasarme el volante.
Tras algunos minutos, nosotros peldaños
sobre el borde de la pista y como acabamos
de volver a poner gasolina en el tanque
(Adrienne consume casi 2 veces más
sobre la arena suave), Geoffroy me dicen
"tienen cuidado, no observo ya la carretera,
destaco los Km", nosotros peldaños
a las 20-25 Km/h ningunos peligros en vista.
Y con todo, muy de un golpe, pado neto en
mi curso, me encuentro la nariz en el parabrisas.
Todo va muy rápidamente, en algunas
fracciones de segundo me pregunto Adrienne
no quiere avanzar más y porqué
mí que no gustan inevitablemente
los parabrisas, me encuentro a abarcar aquél
con entusiasmo.
"tengo el cuello pété!".
El grito de Geoffroy me trae bastante rápidamente
a la realidad. Cuando me vuelvo hacia él,
lo veo tenerse el cuello con las dos manos
e intentar querer salir del coche. Me precipito
entonces del otro lado para ayudarle a lo
sacar y alargarlo a algunos metros de allí,
a la sombra de un árbol.
En torno nosotros nada. Finalmente nada.
Hay bien hierba, algunos árboles
y arena. Pero no hay terminal de ayuda,
no hay Samu o de poli. No hay médico,
no hay teléfono. ¡Ah si! Hay
me. Los algunos conceptos que me permanecen
de mi AFPS (primer ayuda) me vuelven de
nuevo rápidamente al espíritu.
1. balizar el perímetro para evitar
cualquier otro accidente con otros vehículos
hecho (allí fui especialmente rápido!)
2. Llamar las ayudas Euh.... paso... question
siguiente
3. Ocuparse de las víctimas y reconfortarlos
allí tampoco, no hay problema dado
que mí casi no se asusta en absoluto....
finalmente no...
Yo
curso pues al coche para sacar un catre
de tijera y allí alargar a Geoffroy.
Sobre esta cama de hospital improvisada,
comienzo una digna auscultación de
los más grandes profesores parisienses.
Geoffroy, me oye, me ve y puede ir. Alargado,
puede mover a todos sus miembros, no tiene
hemorragias de nariz, ni de orejas, puede
mover muy penosamente el cuello y al palpamiento,
su cervicales no parecen en migas. Si tiene
alguna cosa, es pues puede ser una vértebra
agrietada. Aquí no se me no avanza
más que eso pero al menos no estoy
ya impaciente.
Después
de haberle dado agua, el comprime para restaurarle
el frente y haberle lavado la cara con lingettes
de agua de colonia (y sí se tenía
incluso eso), voy en dirección de
un techo de choza que creí percibir
un poco más lejos.
Después de moult explicaciones (no
evidente de explicar eso en señal),
los habitantes del gourbi situado a 500m
del accidente, aprovechan del carriole con
las cuales van a conducir a Geoffroy en
el médico el lo más cerca
posible situado a 8Km detrás nosotros.
El trayecto corre el riesgo de ser muy doloroso
para Geoffroy, pero apenas podemos elegir.
Hacia 21h00, dos hombres llegan sobre sus
asnos con tres herramientas. Son mecánicos
y quieren reparar el coche. No sé
absolutamente el dónde salen, ni
que los envió, pero ellos está
allí, y se convencen de poder repararlo
todo.
El coche está todavía sobre
el borde de la pista, las altos existencias
que abarcaba me explica el accidente. Ocupado
a comprobar si pudiera recuperar la pista
que era a mi derecha, no vi estas existencias
que jugaban a cache-c con las hierbas de
la sabana.
El parachoques tomó la forma del
árbol, se tuercen el ventilador también
y el marco en su parte más avanzada.
Por oportunidad (o buena organización,
que sabe!), tenemos un ventilador de reemplazo.
¿¿ Por qué no intentar
el golpe? "van allí los muchachos,
he aquí las partes, aquí cómo
es necesario desmontar, he aquí de
las herramientas, buen valor".
Hacia 22h00, Geoffroy vuelve de nuevo del
pueblo, en realidad de médico, él
se entrevistó con un ayudante médico
y un policía. Uno le aconsejó
7 días de descanso sin ninguna auscultación
(bal la MET) el otro estableció un
acta del accidente sin ver el coche (ídem).
El Sudanés que lo acompañó
me propone amablemente acompañarme
a la ciudad de Ghubeish pronto el día
siguiente.
Mientras que Geoffroy permanece alargado
cerca del coche, mi guía y mí
se toman en alto por empleados de la empresa
Sudatel (telecomunicaciones sudanesas).
Golpe de suerte, hablan todos los ingleses.
Están en misión en la región
para instalar pararrayos españoles
mediante una compañía india
(se ve de muy en Sudán).
Tras algunas explicaciones, nos proponen
venir a recuperar el coche con nosotros,
de albergarnos (a la bonita estrella, pero
en seguridad detrás de una pared)
y ayudarnos para todo el otro problema.
Ocho
días de gal o cómo perder
del peso sin hacer deporte:
Durante los primeros días, Geoffroy
intenta recuperarse del accidente siguiendo
siendo alargado el más posible. El
coche se reparó sumariamente (después
de montaje ellos me volvieron a poner un
punado de tornillo y tuercas que no sabían
ya dónde poner) pero desgraciadamente
descubrí un pequeño agujero
en la caja de velocidad. Sería necesario
pues desmontar todo el motor para repararlo.
Geoffroy entonces a una luminosa idea, intercambiar
el coche contra tres asnos y volver de nuevo
en Jartum a espalda de asno. Podríamos
hacerlo en 15 días y sería
una buena manera de no permanecer sobre
un fracaso. Otra posibilidad, reparar el
coche y ponerlo sobre un camión hasta
Nyala (300Km más al Oeste y 300Km
antes de la frontera chadiana), dónde
la carretera se vuelve mejor y seguir hacia
el Chad. Pero todos los locales nos desaconsejan
eso, ya que, según ellos, la carretera
es muy peligrosa después de Nyala.
Se ponen rápidamente todas estas
soluciones en víspera cuando cuatro
días después de nuestra llegada
a Ghubeish, Geoffroy que comienza una diarrea,
se hunde saliendo de los aseos. Es necesario
decir que es deshidratado por su diarrea
y que vario paso sucesivo en estos aseos,
sin ventilación y que se construye
sobre el hoyo escéptico, tienen para
venirlo todo a final del el más duro.
Tiene de la fiebre y no puede tragar nada,
el día siguiente noche delante de
la lista de enfermedades que el Sudanés
diagnosticaron (cuya malaria "que es
mortal en la región cuando comienza
por el vientre...") vamos a ver a un
médico. Afortunadamente, so'lo diagnostica
una buena diarrea y prescribe medicamento
que Geoffroy no puede siempre tragar (vomita
todo). Al salir dicha de la consulta, se
me toma de una fiebre y comienzo a mi vuelta
una diarrea, pero menos severa.
Sólo el día siguiente que
Geoffroy podrá tragar su primera
píldora y algunas galletas.
Precisiones que la ciudad de 30000 habitantes
no nos ofrece mucho elecciones alimentarias.
Se encuentra cojos de atún, arroz,
pastas, pan, la mermelada, algunas verduras
de temporada, la coca y el té. Adiós
los pequeños biscottes y la compota
de manzana, el agua en botella o las tisanas.
¡Viva el ayuno!
Después de estos algunos días
todas nuestras ideas de vuelta o se barren,
no tenemos ya bastante tiempo para incorporarse
al Camerún, debemos darse la vueltanos
en Jartum y producir beneficio con nosotros
lo transporta. Ya que si lo abandonamos
aquí, no podremos probar a este caro
Automóvil Club de Francia que no
la vendimos y que deben volvernos la fianza
exorbitante de 3800 euros que se bloquea
en ellos.
A
la búsqueda de un camión:
Durante cerca de siete días vamos
a buscar un camión susceptible de
llevarnos a Jartum con el coche. Los famosos
38T de los que ya hablamos, hacen eso generalmente,
alzan el coche muy en cumbre de los bolsos
en tejido de yute que transportan, es bastante
impresionante. ¡Aún es necesario
encontrar uno que tendría del lugar
en esta temporada de cosechas! Ali, el mecánico
de la esquina que habla inglés y
que se convirtió en nuestro amigo,
nos ayuda en esta tarea y nos promete entre
otras cosas que uno de sus amigos va a llegar
en una media hora con un camión vacío.
Esperaremos este camión durante 7
días y pienso que el pro'ximo año
lo esperaremos aún. Para colmar esta
espera, encontramos caras del agua incluido
el famoso Baobab hueco (véase cuaderno
de las iniciativas).
Encontramos también a otro Ali responsable
para la ONG Care de un proyecto de restauración
completa de un centenar de estaciones de
bombeo en la provincia. Es un viejo del
vieja que ya hizo mucho proyecto para el
agua, en particular, de los haffirs revolucionarios
cerca de EL Obeid.
Cansados de tener propuestas que alucinan
para la repatriación del coche, proponemos
a la ONG Care heredar. Mal incluyendo nuestra
oferta, comienzan por negar lo que nos hace
asustar durante un medio día. En
la tarde, Ali, el ingeniero hidráulico,
que no era allí la mañana
vuelve de nuevo vernos para para tener más
amplios detalles. Incluyendo que le ofrecemos
para su proyecto de agua un espléndido
coche, acepta y en esa línea nos
hace entrevistar con el recadero de la provincia
para los papeles oficiales y nos organiza
nuestra salida la noche mismo para Jartum.
¡Vuelta
a la casilla salida, nosotros el invierno
parisiense!
De paso en la ciudad de EL Obeid, somos
acogidos por la antena Care que se encuentra.
Sin vacilar, Ahmed Abbo, jefe de proyecto
haffirs, cancela todas sus citas para hacernos
visitar distintos tipos de haffirs (véase
cuaderno de las iniciativas).
Nuestra estancia en Jartum será mucho
menos interesante que el primero. Hay a
otras ONG, pero las idas y vueltas en los
pasillos de la administración aduanera
o en las agencias de viajes nos tomarán
mucho demasiado tiempo.
El 27 de noviembre, quitamos finalmente
de Jartum en dirección París
donde una corta escala debería permitirnos
entrevistar con las escuelas que la siguen
y de reactivar nuestros patrocinadores.
La próxima etapa es Brasil, vivamente
la vuelta en el hemisferio meridional. Parece
que hace frío en París.
Diario
de 29 de octubre al 27 de noviembre de 2003
por Loïc
< precedente siguiente
> vuelta
<<
|